El discurso anticorrupción con el que William Dau logró llegar al Palacio de La Aduana y posesionarse como alcalde, se ha quedado sin cimientos por cuenta de su Primera Dama, Cynthia Pérez Amador, quien tras presentar documentos ‘chimbos’ hoy fue expulsada de la administración por su amigo y jefe.
El mandatario distrital había tratado de contener las innumerables acciones ‘malandrinas’ y corruptas adelantadas por su Primera Dama; sin embargo, cuando se hizo evidente la falsificación del acta de grado de la Corporación Educativa Iafic con el título de Técnologa en Administración de Empresas, tuvo que salir a dar la cara al pueblo que lo eligió y demostrar que ella había incurrido en faltas graves que hoy, además la tienen contra la pared, toda vez que hay investigaciones penales en la Fiscalía y disciplinarias en la Procuraduría.
Monseñor Jorge Enrique Jiménez
Con el dolor del alma William Dau, despidió a quien consideró su única amiga en la administración y quedó claro que la confianza que él depositó en ella, fue traicionada. Y lo peor es que el discurso de la lucha contra la corrupción, por más que quiera mantenerlo, se le fue envolviendo en una paradoja, en la que utilizaron hasta Monseñor Javier Jiménez, a quien hoy los cartageneros muy seguramente quieren escuchar también para reprochar aquellos actos de mentiras y engaños que en nada le hacen bien a los cartageneros pues se convierten en un pésimo ejemplo a seguir.
La pregunta obligada que se hacen muchos líderes hoy es ¿qué tanto podía conocer Dau los innumerables documentos chimbos que presentó Cynthia para mantenerse en su cargo? Y solo, tal vez, hasta que los mismos veedores se dieron a la tarea de poner de presente la situación, no se dio esta reacción del alcalde anticorrupción. A la decisión que ha tomado el mandatario distrital se suman las sanciones por parte de los organismos de control y disciplinarios de la Secretaria General, Diana Martínez Carvajal y del Alcalde de la Localidad Uno, Hernán Negrete Blanco.