Esta historia parece de nunca acabar. Como sacado de un cuento macondiano de García Márquez, pese a todo lo que se dijo, Cinthya Pérez continúa como si nada en la administración. El alcalde William Dau, hace ya casi un mes, manifestó que liquidaría el contrato de la primera dama y anunció que se devolvería lo pagado de más con el fin de tumbar la medida cautela de separación del cargo, de la secretaria Diana Martínez.
Hasta la absolución de monseñor Jorge Enrique Jiménez se buscó y, pese a todo esto, las cosas no cambian y siguen igual; muy a pesar de los escándalos de falsedad en documentos y las investigaciones que adelanta la fiscalía por denuncias penales contra la Primera Dama.
Cinthya, parece sacada de la serie cinematográfica Highlander, cuyo protagonista tiene muchas vidas y además es inmortal. A la fecha, según fuentes de la Contraloría, no han notificado ni el pago al presunto daño patrimonial, ni la liquidación del contrato. Todo parecía que la administración de Dau aguardaba la esperanza en una primera instancia, en la acción de tutela que a todas luces resultó improcedente y le fue negada a su secretaria Diana Martínez.
Ahora bien, esa vela se le apagó a Dau y le queda una segunda opción que es el resultado de la auditoría exprés que realiza la Auditoría General de la República, a la Contraloría Distrital, con ocasión de la denuncia interpuesta por la administración. Amanecerá y veremos, los últimos capítulos de esta novela que bien se podría llamar, CRÓNICA DE UNA DESTITUCIÓN ANUNCIADA.