La tensión no merma en El Salado. Los líderes no ocultan su angustia frente a lo que viene ocurriendo en este población, jurisdicción de El Carmen de Bolívar. Aseguran que hay miedo y zozobra entre sus habitantes quienes han señalado que aguardan prontamente respuestas de las investigaciones que se vienen adelantando y que se den señales de no repetición de la violencia que allí vivieron porque, de no, volverán a abandonar sus tierras buscando garantías para su seguridad.
Las investigaciones se vienen adelantando en procura de dar con los responsables de estas intimidaciones y se ofrecieron hasta 20 millones de pesos a quien brinde información para dar con estas personas. Sin embargo, los líderes sienten que estas labores, aunque demoradas, deben arrojar unos resultados con los que retorne a la zona la tranquilidad y la confianza.
Los mensajes continúan llegando a los celulares de algunos líderes: “Nosotros si vamos a acabar con las plagas, las ratas que habitan en este lugar”, aseguran quienes vienen estableciendo las amenazas.
En las últimas horas se conoció del pronunciamiento por parte de la Unidad de Víctimas que rechazó las amenazas de que han sido víctimas integrantes de la comunidad del corregimiento El Salado, municipio de El Carmen de Bolívar.
Sobre el particular, Vladimir Martin Ramos, director general encargado de la Unidad para las Víctimas, indicó que “solicitamos a los autores de estas amenazas cesar las mismas de manera inmediata y respetar la vida e integridad de los líderes y habitantes de El Salado. Hacemos un llamado respetuoso a las autoridades competentes para que se adopten las medidas a que haya lugar para proteger la vida y evitar la vulneración de sus derechos fundamentales. También le pedimos a la Fiscalía General de la Nación para que se investigue las amenazas y se judicialice a los responsables de las mismas”.
De igual forma, Carlos Camargo, Defensor del Pueblo, hizo llegar una misiva al Fiscal General de la Nación, Francisco Barbosa, en la que le solicita se prioricen las investigaciones en torno a las amenazas que no se baje la guardia.