Por Luis Adolfo Payares Altamiranda/ACORD/AIPS

La ciudad de Cartagena y el departamento de Bolívar, enfrentan quizás en cuanto al béisbol se refiere un oscuro panorama, que no parece tener luz al final del túnel. La actual Liga de Béisbol, hasta el momento no tiene claro si las entidades deportivas, tanto del departamento y de la ciudad, apoyaran el torneo de béisbol local, que tiene más preponderancia en la provincia que en la ciudad de Cartagena, donde pocos clubes van a participar en la categoría de mayores.

El deporte que más gloria le ha dado a nuestro departamento, sufre de una indiferencia total. El estadio 11 de noviembre, está siendo intervenido, pero no se sabe absolutamente nada sobre cómo quedará, y cuáles serían las características de esta intervención. Además, ya está programado un concierto para el mes de julio, el cual podría dañar tanto la infraestructura y el gramado, faltando pocos días para el inicio de un torneo internacional.

Por otro lado, en cuanto al béisbol profesional, el panorama no es menos oscuro, ya que hasta el momento según las informaciones que hemos recogido, el equipo Tigres no saldrá, ya que su propietario, está arrendando o vendiendo la ficha, por un precio de 5 mil millones de pesos, para la venta, y 300 millones de pesos para arriendo. La información que nos manifiestan es que de no concretarse nada para el mes de agosto, el equipo no saldría, y Cartagena no tendrá equipo en el béisbol profesional en la temporada 2024-2025.

Es increíble que la ciudad cabalgue en este mar de incertidumbre en el deporte que nos apasiona, en el deporte que nos ha dado dos títulos mundiales, y que actualmente más de 80 muchachos están en tránsito hacia el béisbol organizado de la MLB, la gran mayoría del departamento de Bolívar.  Desafortunadamente nuestros gobernantes desde hace varios lustros, no sienten pasión por el béisbol, ni tampoco nuestra dirigencia, que orienta los senderos del deporte de los bates y las manillas, tanto en la Liga como en la Federación, son espectadores, y no ejercen un lobby al interior de los entes deportivos o de la alcaldía o de la gobernación, para ver si de alguna manera tenemos por lo menos béisbol en este 2024.

Mi invitación es unirnos los amantes del béisbol, para llevar una vocería seria y sensata sobre lo que verdaderamente hace parte de nuestra cartagenidad, y de procurar que no se pierda en el ostracismo, el vínculo innato, que nos une al deporte de los veintisiete outs, y de las nueve entradas. Ojalá salga algún samaritano que escuche este clamor para que resurja de las cenizas, nuestro querido béisbol, el cual me identifico con la frase que alguna vez dijo el presidente de los Estados Unidos George Bush: «El béisbol ha sido parte de mi vida durante mucho tiempo…creo que desde el vientre de mi madre.

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