Por: Edilberto Marrugo – Especial para ESOVA.CO
La mesura no ha sido históricamente, un capital abundante entre los aficionados del deporte colombiano, nos deslumbramos ante las victorias y nos desilusionamos ante las más mínimas derrotas o situaciones difíciles de nuestros deportistas en cortos espacios de tiempo.
Sin ir muy lejos en la historia, en septiembre 5 de 1993, camino a las eliminatorias para el mundial de futbol USA 1994, la selección Colombia de futbol, con el Pibe Valderrama, Rincón, Asprilla, Córdoba, el “Tren” Valencia entre otros, triunfa categóricamente ante Argentina en el estadio Monumental de River en Buenos Aires 0 – 5, en un juego que si miramos con cuidado, hemos podido salir mal librados a no ser por la actuación sobresaliente de Oscar Córdoba ante los remates de Gabriel Batistuta en los primeros minutos del tiempo inicial. Ya nos creímos campeones mundiales, hasta el Rey Pele, nos candidatizó al título en ese mundial. Luego, como todos sabemos, factores deportivos y extra deportivos dieron al traste una exitosa gestión deportiva, con funestos resultados en primera ronda y consecuencias lamentables como la perdida de la vida del gran Andrés Escobar, en hechos aun por esclarecer plenamente.
Igualmente en fechas posteriores, se desarrollaba el campeonato de la Formula 1 de automovilismo, en la cual se destacaba por su arrojo y valentía el gran Juan Pablo Montoya, quien en el Gran Premio de Brasil de abril 1 de 2001, celebrado en el Autódromo José Carlos Pace, Sao Pablo, con un espectacular sobre paso en la vuelta dos, logró en ese momento la primera posición de la carrera, muchos aún recuerdan ese hecho, lo que no se recuerda mucho, es que Montoya en el giro 38 por colisión daño su vehículo y debió retirarse, mientras Schumacher llegaba en el segundo puesto, acumulando 6 puntos para el campeonato que al final logro con 113 puntos. En el momento del sobre paso, para muchos Montoya era el mejor corredor y había humillado al mejor del mundo.
De ese vaivén del mar de las alegrías y las desilusiones, no se ha salvado Nairo Quintana, el que, en mi humilde concepto, el ciclista más triunfador en carreteras europeas, con 20 victorias, entre ellas el Giro de Italia 2014 y una Vuelta a España 2016. Solo el desconocimiento de la dureza de este deporte y las dificultades que deben afrontar los ciclistas, lleva a endiosarlos en momentos de triunfo y descalificarlos en malos momentos; los ciclistas en ocasiones afrontan en una sola etapa, altas temperaturas, ardiente sol, duras nevadas, fuertes lluvias, fatigas, peligrosas caídas y fallas mecánicas entre otros factores.
Ahora, el turno es para Egan Bernal, quien luego de un brillante e impecable desempeño, incluyendo su segunda victoria por etapas el día lunes 24 de mayo de 2021, momento en el cual se oían y leían comentarios como “No hay con quien”, “Egan el mejor de la historia del ciclismo mundial” “El giro 2021 se acabó, con esa ventaja, todos están liquidados”. Ese mismo Egan, hoy, al final de la etapa 17, tuvo una pequeña y normal crisis en este duro deporte, y aún se mantiene vestido de rosa, con 2:21 minutos de ventaja sobre el segundo en la general Damiano Caruso, 3:23 minutos sobre el tercero, Simon Philip Yates y 6:03 sobre el cuarto Aleksandr Vlasov, Egan tuvo un día difícil, perdiendo unos 56 segundos con Yates, lo que ha dado para comentarios negativos y pesimistas con lo que sigue en esta carrera.
En esta brega deportiva, nada está ganado ni nada está perdido, debemos ser mesurados en el análisis, todo puede suceder, son seres humanos y luego de 17 jornadas y más de 71 horas de pedaleo a la intemperie, a la lluvia, nieve y sol, todos los cuerpos se hallan maltrechos y triunfará el que tenga la mejor recuperación de un día para otro, apoyados por los equipos médicos y fisioterapias. En fin, el panorama es favorable para Egan y el Ineos, quien a la fecha ha contado con un gran equipo entre ellos a su compatriota Daniel Felipe Martínez, quien hoy, como se dice en los deportes de conjunto, se echó el equipo al hombro en los momentos más difíciles para su líder, aun contra sus intereses de mejorar en la general o una victoria en etapa. Mesurados esperamos que Egan con su juventud y buena preparación, pueda sacar adelante esta prueba y levantar los brazos en Milán el próximo 30 de mayo 2021 al final de la etapa contra reloj individual de 30,3 kilómetros, para alegría de los colombianos.
Estaremos atentos y haciendo fuerza por Egan Bernal estos últimos 4 días, para que logre su segundo gran triunfo en las competencias World Tour y consolidarse entre los grandes e históricos del ciclismo.