Las recusaciones presentadas por el concejal Carlos Barrios, de Cambio Radical, a varios de sus colegas, justo cuando transcurrían apenas 20 minutos de la sesión para elegir la nueva mesa directiva fue calificada por la aspirante a la presidencia Gloria Estrada como una jugada sucia y rastrera de esa clase política que se niega a la renovación.
La sesión se levantó cuando Barrios sacó el as bajo la manga y adujo falta de garantías para proseguir. En ese momento, recibió total respaldo por parte del presidente y miembro de la bancada, Wilson Toncel quien decidió levantarla. Caos y confusión generó esta situación en una corporación que no goza de una buena imagen ante la opinión de los cartageneros y que deja de presente que poco importan los problemas de ciudad cuando tienen un interés político de por medio.
La tensión continúa para los miembros del Concejo quienes ya habían movido estratégicamente las fichas de un ajedrez en el que se daba por sentado que la nueva presidente de la corporación sería Gloria Estrada del partido Liberal. Todo parece indicar que la bancada minoritaria buscará tomar este aire que le ha dado la estrategia del concejal Carlos Barrios para observar a la distancia quiénes o qué cabildantes se pueden volcar para respaldar la aspiración de Lewis Montero, el oponente de Estrada.
Se tendrá que esperar entonces a que se resuelva dicha recusación mientras en la mente de quienes respaldaban la aspiración de la concejal Gloria Estrada se seguirá pensando que fue un saboteo a la plenaria.


