Lo dicho, William Dau Chamatt salió más vivo que un poco y tras la figura de ser impoluto y anticorruptivo, se escondía ese ser maquiavélico, astuto, ególatra y rastrero.

Recuerdo bien lo que se dijo desde el inicio de su administración: un salto al vació, un tiro al pie. Los hallazgos de los entes de control dejan entrever que Cartagena sucumbió en su administración y tras escuchar los descargos de sus funcionarios las irregularidades son graves. Razón tuvo, en su momento, el periodista Edinson Lucio cuando tildó a Dau de zambiloco.

Para fortuna nuestra Dau decía ser el papá y querer a los cartageneros y, tal vez por esta razón, solo detectaron un detrimento patrimonial superior a los 7 mil millones de pesos. ¿Qué tal si no nos quiere? Esto, es de aclarar, corresponde a la vigencia de 2023.

Más de 61 hallazgos se pusieron al descubierto en su administración: 21 de ellos son hallazgos administrativos, 18 tienen una presunta incidencia disciplinaria, 14 tienen una posible incidencia penal, y ocho tienen una supuesta incidencia fiscal, con un presunto detrimento patrimonial.

A Dau se le vinieron encima, y ya era hora, todas ‘las ías’: La Contraloría Distrital correrá traslado a la Procuraduría con investigaciones disciplinarias y la Fiscalía con las respectivas investigaciones penales. Y en cuanto a los hallazgos con posible incidencia fiscal, se conoció que ya fueron trasladados a la Dirección Técnica de Responsabilidad Fiscal de la Contraloría de Cartagena, para sus respectivos análisis.

Ahora bien, según lo dispuesto por la normatividad vigente, aunque los hechos objeto de investigación fueron cometidos en la administración anterior, le corresponde a Dumek Turbay poner de presente un Plan de Mejoramiento con las acciones correctivas para superar las embarradas cometidas por William Dau. Esto a fin de corregir los hechos referenciados en los hallazgos, los responsables de su ejecución, el tiempo necesario para su aplicación.

DAU, UN EGÓLATRA SIN CONTROL

Todo parece indicar que el exalcalde era un ególatra desmandado y entre los contratos auditados estuvo el suscrito por William Dau con Lukatmi S.A.S., en plena Ley de Garantías, para el desarrollo de un plan de medios durante los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2023, para la publicación de noticias favorables al gobierno distrital en portales y otros medios.

De igual manera, se asegura en el informe que el Distrito suscribió un contrato con una Unión Temporal para el fortalecimiento de las organizaciones comunales en el Distrito, por $631’562.500, y quedó claro que no existe ningún tipo de evidencias que permita colegir, que el director del proyecto, el coordinador administrativo, los trabajadores sociales y el comunicador social realizaron algún tipo de actividades en la ejecución del contrato y que justifique el pago a ellos realizado.

Estos hallazgos: 18 con presunta incidencia disciplinaria, 14 con posible incidencia penal, y ocho con supuesta incidencia fiscal, se suman a los que por más de $264 mil millones de posible detrimento detectó también la Contraloría en la ejecución de sendos contratos suscritos por el Distrito y la Unidad Administrativa Especial de Catastro Distrital, y con Aguas de Cartagena, de acuerdo con un comunicado de prensa remitido por el ente de control fiscal.

Esta pesadilla de Dau se acabó para fortuna de los cartageneros y ahora vivimos un nuevo amanecer liderado por Dumek Turbay que esperamos nos lleve a la ciudad con la que todos soñamos. Está claro, el nuevo alcalde quiere a Cartagena y anhela que avance.

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