Una masiva protesta se registró en horas de la mañana por parte de habitantes de los corregimientos del municipio de Turbaco quienes están cansados, según ellos, del olvido en el que los tiene la administración del alcalde Guillermo Torres. Más de 120 habitantes, entre los que se encuentran nativos de Aguas Prietas, Cañaveral y San José de Chiquito y estudiantes se despalazaron hasta la sede de la alcaldía ubicada en Inmacol y armados con pancartas y arengas exigieron que las mesas sectoriales se transformen, por fin en una realidad y que la inversión social se logre concretar.
Los habitantes decidieron cerrar la Troncal de Occidente y los trancones fueron monumentales. «Nos hemos desplazado hasta la alcaldía para encontrar una respuesta por parte del alcalde o quien esté encargado porque el abandono en el que nos encontramos es total. Nadie nos ha tenido en cuenta y la situación pinta cada vez peor», precisó Luis Eduardo Salgado, habitante de Cañaveral.
Al interior de la sede de la alcaldía los pobladores armaron un fogón con el fin de preparar un sancocho y darle espera a que los funcionarios de la alcaldía les den una respuesta frente a los múltiples problemas que los agobian. Aseguran que en torno a esta administración se sembró una gran expectativa para superar los problemas y luego de dos años siguen en el limbo y nadie les brinda soluciones a sus problemas.
LOS TORMENTOS DE LOS CORREGIMIENTOS
En relación con Cañaveral y San José de Chiquito, los habitantes coinciden en que las vías de acceso se encuentran en pésimas condiciones y las lluvias por estos días han evidenciado el abandono. Los cañaveraleros precisan que no cuentan con agua potable y los problemas de inseguridad, en este momento, los tiene arrinconados.
En San José de Chiquito precisan entre tanto que les entregaron recientemente un puesto de salud que no cuenta con la debida dotación ni tienen el cuerpo médico para atenderlos. Señalan además que a la institución educativa, en la que se encuentran más de 120 estudiantes, se le está desplomando una pared que puede en cualquier momento ocasionar una tragedia.
Finalmente, en el corregimiento de Aguas Prietas, la situación que les preocupa tiene que ver con la falta de empleo y de programas de emprendimiento que logre sacar adelante a los nativos. Añaden que el grave problema es que un alto porcentaje de la población de esta zona corregimental son labriegos y para estas actividades se contaba con una finca en la que los pobladores iban y cultivaban para sustentar su día a día. El grave problema es que la propietaria de la finca hoy se niega a seguir alquilándole la tierra a la administración municipal y no hay una respuesta por parte de la alcaldía.



